4 Plus Beaux Villages de France alrededor del camping Les Cascades
Si los alrededores de nuestro camping Les Cascades merecen una visita, es en gran parte gracias a la presencia de pueblos con el sello de "Plus Beaux Villages de France". Estas joyas del patrimonio, situadas entre garriga, ríos y acantilados, ofrecen un entorno encantador para los amantes de la autenticidad y la naturaleza. Cada uno de estos pueblos revela un encanto único a través de sus calles adoquinadas, sus casas de piedra y sus paisajes impresionantes.
Y lo mejor de todo es que todos los Plus Beaux Villages de France (Pueblos Mas Bellos de Francia) del Gard se encuentran a menos de 20 kilómetros de su alquiler de mobil home en el Gard.
La Roque-sur-Cèze
Encaramado en un espolón rocoso que domina el río Cèze, La Roque-sur-Cèze es un pueblo con carácter y un encanto atemporal. Sus calles adoquinadas, bordeadas de casas de piedra con tejados de tejas, serpentean hasta el castillo y la capilla románica que dominan el valle. El Puente Charles-Martel, un magnífico puente medieval de arcos, cruza el río y conduce a las famosas Cascadas de Sautadet, un espectacular sitio natural donde el agua se precipita en impresionantes marmitas de gigante.
Clasificado entre los Plus Beaux Villages de France, La Roque-sur-Cèze seduce con su atmósfera tranquila y su panorama excepcional. Aquí también se encuentra nuestro camping de 4 estrellas, Les Cascades, un destino vacacional que ofrece un entorno idílico para alojarse en el corazón de esta región excepcional.
Montclus
Montclus, una joya medieval enclavada en un meandro del río Cèze, revela un patrimonio rico y bien conservado. Su imponente torreón, vestigio de un antiguo castillo, es testigo de su historia que se remonta al siglo XII. El pueblo, con sus calles sombreadas y sus casas de piedra dorada, invita a un paseo fuera del tiempo.
Aquí no hay tráfico, solo la calma y la belleza de los paisajes circundantes, entre viñedos y garriga. A la entrada del pueblo, un antiguo monasterio troglodita añade un toque de misterio a este refugio de autenticidad.
Aiguèze
Dominando las gargantas del Ardèche, Aiguèze ofrece una vista impresionante de los acantilados y el río que fluye abajo. Este pueblo medieval fortificado seduce por su notable patrimonio, con su castillo en ruinas, su iglesia fortificada y sus murallas que recuerdan su antiguo papel estratégico.
Pasear por sus calles floridas, bordeadas de casas de piedra magníficamente restauradas, es un verdadero placer. En verano, la plaza del pueblo cobra vida con sus mercados y terrazas donde se pueden saborear los productos locales, acompañados por el canto de las cigarras.
Lussan
Encumbrado en su promontorio rocoso, Lussan es un verdadero balcón sobre la garriga y las Cévennes. Este pueblo con carácter, rodeado de murallas, alberga un patrimonio notable con sus calles adoquinadas, sus casas de piedra y su castillo del siglo XV.
Más allá de su encanto arquitectónico, Lussan es también el punto de partida de hermosas rutas de senderismo, especialmente hacia las Concluses, un espectacular sitio natural esculpido por el agua. Entre historia, naturaleza y tradiciones, Lussan encarna a la perfección el alma auténtica del Gard provenzal.